lunes, 17 de diciembre de 2012

1:37am @ Gatwick

El único objetivo de esta entrada es presumir de que al fin estoy cumpliendo uno de mis sueños, uno de los más idiotas e insignificantes, pero al fin al cabo, es uno de los que más queria experimentar; Estoy escribiendo esta entrada desde un Aeropuerto mientras espero mi vuelo.

Para mis vacaciones de navidad iré a Barcelona y haré un pequeño tour por España (si es que ir a dos ciudades se le puede llamar tour) no puedo decir que estoy escribiendo esta entrada por pura emoción, es más el hecho de que no me quiero quedar dormido mientras espero mi vuelo, al que le faltan en este momento unas 6 horas para despegar.

Pero si me doy cuenta de algo, es así cómo me siento dentro de una película, estoy en un aeropuerto, luchando contra el sueño, saco mi laptop y empiezo a bloggear. Escucho a varias chicas italianas discutir sobre algo, me imagino que sobre el viaje que están por hacer, a mi izquierda tengo un grupo de asiáticos jugando juegos en sus laptops y Ipads, y a mi derecha un montón de gente tirada sobre bancos, cobijados con sus sweteres o mantas durmiendo.

Hasta ahora yo en mi lucha en contra del sueño, llevo un muffin, un mochaccino, un sandwich y dos litros de agua, todo hasta ahora sin funcionar cómo esperaria, justo el día en que debo desvelarme es el día cuando más sueño tengo.

Justo después de estas vacaciones me quedan muchas decisiones importantes que tomar, por ahora mi mente está ocupada en eso, todo esa expectación agobiante de cómo saldrán las cosas, es impresionante cómo pasa el tiempo, y cómo las decisiones que debemos tomar cada vez se vuelven más dificiles y urgentes.

No tengo ni siquiera ganas de comentar la situación de Venezuela, hace unos meses llegué a la conclusión de que aunque trillado, no puede ser más cierto aquél dicho de que "Tenemos el país que merecemos" y bueno, supongo que es cuestión de aprender a moverse aceptando que la mayoría exigió la continuidad en un puesto y el cambio en muchos otros. Lo único que puedo decir es que tengo la esperanza de que los nuevos puestos sean llevados bajo una buena gestión, y el mismo pueblo sea quien se ocupe de juzgar así cómo lo hicieron esta vez.

Por ahora me despido, y sí, lo sé, que entrada más indiferente, y pobre de contenido, sin mencionar dispersa, pero todo el objeto de ella, era simplemente mantener el sueño alejado, y poder decir que sí, una vez bloguee desde un areopuerto.